Realiza un análisis del sitio

Muchas veces, se focaliza en las campañas publicitarias dejando de lado lo más importante: el sitio web. Hay muchos factores técnicos que pueden estar haciendo que no obtengas las conversiones que deseas.

Por ejemplo, un mal servicio de hosting web puede hacer que no se produzcan ventas. El alojamiento web es el que permite que se pueda acceder a tu sitio a través de internet. Es por esto que seleccionar entre la varios planes de hosting web puede ser fundamental para el CRO. Si eliges un hosting que no es adecuado ya sea por la capacidad o porque el proveedor no es el mejor, puede ocasionar que tu sitio no esté disponible durante parte del día.

Para analizar el sitio puedes usar muchas herramientas disponibles de forma gratuita. Lo importante es que veas las visitas (esto puedes hacerlo a través de Analytics), para ver tasas de rebote, por ejemplo. También debes ver el tiempo de carga y el posicionamiento orgánico, entre otros factores.

Además del sitio, debes analizar factores externos a él

Cuando analizas tu sitio, también se pueden notar factores externos. Por ejemplo, si analizas en Analytics cuál es la fuente del tráfico, puedes notar que muchos vienen por búsqueda en Google o campañas en Instagram. También puedes ver que quizás la mayor cantidad del tráfico proviene de otras zonas con las que no trabajas y por eso no se producen conversiones.

Lo importante en este punto, es analizar a fondo de dónde viene el tráfico para focalizar en las campañas de marketing. En este caso, puedes notar que, a modo de ejemplo, a pesar de que la mayor cantidad de tráfico proviene de una campaña de Facebook, las conversiones de esa campaña son muy pocas. Entonces debes analizar a fondo esa campaña y la segmentación de la audiencia.

La respuesta a la falta de conversión puede estar en nuestro sitio, pero también está en la fuente del tráfico de la página. Optimizar las campañas debe ser una tarea periódica.

Antes de llevar a cabo cualquier cambio, hay que hacer un test

Después de un profundo análisis del sitio y de los factores externos, llega el momento de empezar a realizar pruebas. Fuera de toda la investigación que se realiza, no hay nada más determinante que los tests.

A la hora de llevar a cabo tests (por ejemplo, un test A/B), hay que tener en cuenta que no podemos modificar más de una variable. Es decir, por más de que lo desees, no puedes cambiar cinco cosas del sitio y todas tus campañas de marketing porque no sabrás qué es lo que produce el cambio en la tasa de conversión. Debes ir probándolos individualmente.

No modifiques todo junto, hazlo de forma progresiva

Al igual que los tests, cuando tengas un resultado determinante sobre algo (por ejemplo, en una campaña de marketing quizás cierto formato de anuncio no funciona tanto como el nuevo que implementaste), no cambies todo de golpe. Esto puede provocar muchas consecuencias en tu sitio. Si tienes suerte, serán positivas. Pero si no es así, quizás veas como la tasa de conversión sigue cayendo.

Ve implementando todas las acciones de a poco y con paciencia. Esta es la mejor forma de confirmar, efectivamente, que lo que estás haciendo es beneficioso para tu web. De no ser así, sabrás cuál es el factor que debes volver a poner tal como estaba antes.

Sería muy optimista esperar que el 100% de los visitantes de la página lleven a cabo una acción. No hay un número específico que determine una tasa que esté bien, dado que depende de la conversión. No es lo mismo adherirnos a un newsletter que sólo pide el correo electrónico, que suscribirnos a uno que solicita email, número de teléfono y una tarjeta de crédito. Pero puedes obtener la mejor tasa de conversión si realizar CRO de forma periódica.